Puertas de comunidad

Material resistente y opciones de cerraduras avanzadas.

• Robustez: El aluminio, aunque ligero, es muy resistente, lo que contribuye a la seguridad del edificio.
• Sistemas de cierre: Estas puertas suelen incorporar cerraduras de alta seguridad y sistemas de control de acceso, como cerraduras electrónicas, códigos de acceso, o tarjetas magnéticas.

Aluminio: Es un material ligero pero muy resistente, lo que lo hace ideal para puertas que deben soportar un uso constante. No se oxida, lo que garantiza una larga vida útil sin necesidad de tratamientos especiales.

• Variedad de estilos: Las puertas de aluminio pueden encontrarse en una amplia gama de diseños, desde minimalistas y modernas hasta más tradicionales, con detalles decorativos.
• Personalización: Pueden ser personalizadas en términos de color, acabado (mate, brillante, anodizado, etc.) y detalles como inserciones de vidrio o paneles decorativos.

• Resistencia a la corrosión: El aluminio es naturalmente resistente a la corrosión, por lo que estas puertas no se deterioran fácilmente con la exposición a los elementos.
• Mantenimiento mínimo: Requieren poco mantenimiento, generalmente una limpieza periódica para mantener su apariencia y funcionalidad.

• Aislamiento térmico: Pueden incorporar perfiles con rotura de puente térmico y paneles aislantes para mejorar la eficiencia energética del edificio.
• Aislamiento acústico: Ofrecen buen aislamiento acústico, reduciendo la transmisión de ruidos del exterior al interior del edificio.

Puertas automáticas: Muchos modelos pueden equiparse con sistemas de apertura automática, facilitando el acceso a personas con movilidad reducida y mejorando la comodidad para todos los usuarios.