Aluminio

Divisiones de oficina

Los divisores de oficina de aluminio y cristal son elementos arquitectónicos modernos y funcionales que se utilizan para dividir y organizar espacios dentro de una oficina sin construir paredes permanentes.

Realizamos divisiones de oficina y las diseñamos siguiendo una serie de principios básicos que permiten una gran versatilidad y que contribuyen a mejorar la habitabilidad de su oficina, con la correspondiente mejora en el ambiente de trabajo.

Nuestros trabajos de divisiones de oficina consiguen una uniformidad estética con los elementos arquitectónicos de su oficina, a ello contribuyen la disponibilidad de elementos de integración. Así mismo, se aumenta la versatilidad de la instalación con elementos como los tabiques armario que permiten contar con amplios espacios destinados al almacenamiento y a la organización perfectamente integrados en el sistema.

Metalsalinas

Aplicaciones Comunes

Espacios de oficinas Corporativas

Utilizados para crear salas de reuniones, oficinas privadas y áreas de trabajo colaborativo sin comprometer la luz natural y la sensación de espacio abierto.

Espacios de oficinas de Coworking

Ideales para configurar áreas de trabajo temporales y flexibles que pueden reconfigurarse rápidamente según la demanda de los usuarios.

Recepciones y Áreas de Espera

Pueden utilizarse para separar áreas de recepción y espera sin bloquear la vista, manteniendo un ambiente acogedor y profesional.

Centros de Conferencias y Formación

Ayudan a dividir grandes espacios en áreas más pequeñas para reuniones, capacitaciones y conferencias, facilitando el control acústico y visual.

Características y ventajas

Características de los Divisores de Oficina de Aluminio

  • Aunque permiten la transparencia visual, pueden incorporar cristales especiales y sellos en los marcos de aluminio para proporcionar un buen aislamiento acústico, reduciendo el ruido entre diferentes áreas de trabajo.
  • Los cristales opacos o translúcidos ofrecen privacidad visual cuando se requiere.
  • Tanto el aluminio como el cristal son materiales duraderos y de bajo mantenimiento. El aluminio no se corroe fácilmente y el cristal puede limpiarse fácilmente con productos de limpieza convencionales.
  • Resisten bien al desgaste diario en entornos de alta actividad.
  • Se pueden personalizar para adaptarse a cualquier estilo de oficina, desde los más modernos hasta los más tradicionales.
  • Permiten la integración de sistemas eléctricos y de comunicación en los marcos, manteniendo un aspecto limpio y ordenado.
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